Las cinco heridas que se produjeron en tu CONCEPCIÓN, GESTACIÓN e INFANCIA hacen que te veas, sientas y relaciones con tu entorno de una manera determinada.
Puedes tener una, tres, las cinco o ninguna, todo depende de como hayas interpretado inconscientemente tu modo de estar en el mundo con las circunstancias que te rodeaban en ese instante.
La primera herida es el RECHAZO, le sigue el ABANDONO, la HUMILLACIÓN, la TRAICIÓN y por último pero no menos importante la INJUSTICIA.
RECHAZO: se produce en el vientre materno, cuando mamá se entera que esta embarazada de ti y eres una sorpresa.
Este rechazo fugaz o no, se queda grabado en tu inconsciente y aunque mamá rectifique, esa emoción ya esta grabada.
Esta impronta puede afectar tu vida haciéndote pasar por ser rechazad@ por los compañeros (bullying, mobbing), por la pareja, por tu familia y por ti mismo, (no te gustas).
ABANDONO: esta herida se puede producir tanto en la gestación, como en la niñez.
Si tu padre abandona a tu madre por los motivos que sean, puedes interpretar este hecho de manera inconsciente “es por tu mi culpa”, te sentirás poco valios@ para él y esto te llevara a vivir a lo largo de la vida diferentes abandonos, sobretodo de pareja, de trabajo y de estudios.
Terminas una relación antes de que tu pareja lo haga para no sentir el dolor nuevamente de ser abandonad@.
No terminas los estudios porque no te sientes valid@ para hacerlo.
HUMILLACIÓN: por lo general se genera en la niñez si constantemente tus padres, familiares y/o profesores (personajes que consideramos con autoridad en nuestra vida) te desaprueban constantemente aunque te esforzaste por hacer todo “bien”.
Puede nacer en la gestación si tu madre vivió humillaciones.
También puede surgir por no ser aceptad@ físicamente.
TRAICIÓN: esta herida se genera por la decepción que vives una y otra vez por las promesas no cumplidas de tus padres.
Papá/ Mamá : Te prometo que mañana jugaremos.
Te prometo que mañana te leo el cuento.
Te prometo que mañana vamos al parque.
Ese mañana nunca llega. No es lo mismo 1 que 50 promesas no cumplidas, aunque basta con una para que inconscientemente puedas interpretarla como traición.
Esto creará desconfianza y un sentimiento de no ser merecedor de cosas buenas en tu vida.
INJUSTICIA: se instala en ti el sentimiento de ser víctima o verdugo por haber crecido con unos padres muy exigentes, fríos y autoritarios.
Puede que hayas pasado por maltrato físico o psicológico y esto te puede convertir en una persona rígida, insegura y desconfiada.
Vives a la defensiva.
Ser padre o madre no viene con un libro de instrucciones y pese a que todas estas heridas fueron trasmitidas por ellos o por nuestro entorno, quiero que sepas que sucedió de manera inconsciente.
¿Tal vez porque a ellos también se las heredaron sus padres?.
Si, así es.
Es hora de cambiar el patrón de conducta!!
Si te sientes identificad@ con todas o alguna de estas heridas estaré encantada de ayudarte a sanarla, sino es así te doy la enhorabuena, ya llevas mucho camino aprendido y no te ha hecho falta pasar por estos dramas.
Angie Moreno